Cuando juntas palabras, conceptos, ideas, sensaciones, salen a la luz las
locuras y los proyectos más raros e inverosímiles. Es decir, los mejores. Siempre
además, de la forma más inesperada posible. Esta mañana cayó en mis manos la LP
del Sudeste Asiático por unas casualidades de la vida que no vienen al caso. La
LP, antiguamente conocida en nuestra jerga como la "innombrable" y
aún sólo pronunciable en mi Blog por medio de sus iniciales (creo que el
castigo durará hasta 2019 por lo menos). Bueno, si algo tiene el tiempo es que
todo lo cura, hasta el punto de que incluso esta máxima es aplicable en el
sector
"guías-de-viajes-de-mochileros-de-onda-chachi-guay".
Me puse a mirarla, además una LP en castellano, oh dios!, tanto tiempo después!
Dejé caer mi dedo inocente, cual niñito del colegio de San Ildefonso que tanto
tenemos en mente estos días, y de todos los países, cha channn, salió:
Indonesia. Pensé para mis adentros:
Todo cuadra. Va a ser que mi mano (dedito en este caso) inocente ha ido a parar
a uno de los pocos destinos del SEA que no tocamos en nuestro anterior periplo.
Y me dije: esto es una premonición. Y como ahora está de moda el tema ese de
que "todo sucede por algo" aunque no sepamos por qué ni podamos
demostrarlo matemáticamente, pues me guardé este sueñecito, este proyecto de
mochilear de nuevo por el mundo en un huequito de mi Hard Disk, bien
guardadito, para que no interfiera con el exterior, que conserve su punto de
locura, de sueño loco, de destino soñado, de vuelta a la carretera, como una de
esas ilusiones de las que tienes el pálpito que se va a cumplir pronto, aunque
no puedas demostrarlo, ni lógica ni matemáticamente.
Así que aquí aguardo mi hora, será en este 2013,
a mí me va la marcha, porque me gusta el 13,
porque nací un día 13, porque es impar, porque es primo, raro, porque no tiene
buena prensa, porque dicen que será muy malo y yo intuyo que para mí será muy
bueno. Porque salió elegido de una casualidad, sin pies ni cabeza, como cuando compraba
discos de grupos que no conocía sólo porque me gustaba la portada. Porque
mientas escribo esto en una cafetería de un hotel de Noja, escucho a la gente
contar donde va a pasar las Navidades, con su cuñado/cuñada/tíos/tías/suegros/suegras
y mientras a mí se me va la cabeza viendo fotos en Google de este lejano
destino y buscando billetes de avión con 10 pantallas abiertas a la vez. Así que
por eso quiero pasar una parte de este 2013 lejos, bien lejos, en Indonesia,
ese país apuntado a golpe de dedo índice inocente. Por algo será, porque algo
me aguarda allí, estoy seguro!
Ke Indonesia segera.
